El 95 % de la electricidad que consume una bombilla convencional se convierte en calor. El miserable resto, en luz visible.
Es un invento del siglo XIX. Hoy su uso es como si aún nos comunicáramos con tam-tam. Hace tiempo que existen bombillas que no son estufas y que nos proporcionan casi exclusivamente luz.
Cambia hoy mismo tus bombillas calientes por otras de bajo consumo: ahorra dinero en tu factura de la luz y, sobretodo, contamina menos.
www.hoycambiomibombilla.com/
1 comentario:
Visitando tu blog... me gusto mucho, felicidades!! y gracias por el consejo..ahorrare de ahora en adelante la energia :)
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